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OPINIÓN: Yo Campesino / Narcogobierno

by Pablo Luna
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¿Inexplicablemente? no hay combate al crimen; masacres impunes y cínicas

Por: Miguel A. Rocha Valencia

Ya se sabe quiénes no visitarán Estados Unidos el resto de sus vidas: los nuevos gobernadores de Sonora, Sinaloa, Nayarit, San Luis Potosí y Baja California. Al estilo de Morena, en Estados Unidos les abrieron carpetas de investigación por su probable relación con el crimen organizado y estarán bajo la lupa de la Drug Enforcement Administration (DEA) para acumularles cargos.

De tal indagatoria no escapa la inacción del gobierno federal y de los titulares de las Fuerzas Armadas y Fiscalía General de la República que se mantienen con los brazos cruzados ante la acción de los criminales que avanzan impune y cínicamente en el territorio nacional, imponen autoridades y crean ínsulas de paso exclusivo como diversos puntos de Michoacán, Tamaulipas, Coahuila, Chihuahua y desde luego Sinaloa y Sonora, donde están por llegar Rubén Rocha y Alfonso Durazo, quienes ni cobijados por las alas del Ganso, se van a salvar de juicio cuando llegue su hora. Lo saben. Ricardo Gallardo de San Luis Potosí, también.

Las tomas con masacres previas de Aguililla, Michoacán, Bavispe, Sonora y Reynosa, Tamaulipas, son ejemplos claros donde se impone el crimen quedándose con el territorio sin que exista autoridad que lo impida, a pesar de los 100 mil efectivos de la Guardia Nacional, los 320 mil elementos de las Fuerzas Armadas y los miles que sumarían los agentes de la Fiscalía General de la República.

Mejor todos esos elementos se dedican a perseguir migrantes, construir obras o ejecutar venganzas en vez de cumplir con su responsabilidad de proveer seguridad a los ciudadanos, al país y protegernos d la delincuencia.

No hay quien contenga a los criminales; la política del Mesías tropical de “abrazos, no balazos” entrega cada vez más porciones del territorio nacional a los traficantes de drogas, armas, personas, y ¡políticos!

Porque hoy, el crimen organizado, ese al que el machuchón de Palacio Nacional reconoció por “sólo” asesinar a 70 personas el día de las elecciones federales, incursiona abiertamente en las elecciones e impone candidatos. Por las buenas o las malas hace desistir a sus opositores o de plano, a plena luz, ante autoridades y fuerzas de “seguridad”, se roba las urnas como en Ahome y Mochis en Sinaloa, Valle de Bravo, Estado de México o Sonora donde ganaron aspirantes de Morena.

Bueno en Tamaulipas se hicieron de la mayoría en el Congreso y desde ahí, darán gusto al Profeta de la 4T para sumarse al desafuero del gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, por eso ya no se insiste más en su aprehensión. Mandatario que tal vez a cambio de estar en paz, entregó la Cámara local a Morena.

Lo peor es que ese ejército de quienes deben proteger la seguridad de las personas y el país, no actúan si no se les ordena, aunque en ello pierdan el honor, entreguen las armas y se agachen ante el crimen.

En su mañanera, el caudillo anunció que dará instrucciones a su consejero jurídico para que la FGR del otro impresentable, Alejandro Gertz Manero investigue el asesinato a mansalva de 14 ciudadanos inocentes en Reynosa, como si no debiera actuar por ley ante la comisión de delitos federales. ¿Y los militares?

Otra masacre que el Ganso habrá de ignorar, se cubre los ojos, voltea a otro lado para dedicarse a su deporte favorito de acusar a los demás de los males que sufre el país, prefiere hablar de rifas, de méritos de sus ayudantes para convertirlos en funcionarios, así como en su locura de poder, Calígula nombró cónsul y sacerdote a su caballo Incitato.

Con el caudillo macuspano, no se trata de un gobierno de los mejores, sino como dice Paco Rodríguez, de la kakistócracia, con los peores, los más ignorantes e incapaces porque esos, son los leales, quienes se hincan ante el amo y no reclaman, pierden la dignidad humana ante el poder.

Ese es el México de hoy, el de los incapaces.

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