Con una temporada del 26 de abril al 1º de junio, la obra Tártaro se presenta en versión presenacial en el Teatro del Centro Cultural Helénico.
Es interpretada por Bernardo Gamboa, del colectivo TeatroSinParedes y es un monólogo que reflexiona sobre las circunstancias que enfrenta la juventud.
Esto debido al narcotráfico imperante en todo el país. La puesta en escena es un inigualable cruce entre la investigación sociológica y la poesía.
Cuenta la historia de un sicario, el hijo de una nación en ruinas, gestado en medio de una guerra fratricida.
Asistimos al último instante de su último enfrentamiento: en medio de las ráfagas, siente el golpe del disparo que segará su vida.
Al buscar sentido, recorre sus momentos clave: desde su anémica gestación, hasta la agonía de su madre provocada por sus condiciones de trabajo.
Contempla a su pueblo ocupado por camionetas de lujo y acallarse ante las ráfagas nocturnas. Ve a su hermana ser levantada y no volver.
Cómo desde niño se hizo halcón, luego escolta de un jefe de plaza. Ganó poder. Mamó violencia. Se hizo sicario y se convirtió en una máquina de muerte.
La obra atraviesa la trayectoria de vida de un joven como hay miles en nuestro país. Un asesino a sueldo. ¿Un monstruo o un mártir?
Esta pieza es una creación del Colectivo TeatroSinParedes, diigida por David Psalmon, cuya caracteristica son las profundamente vinculadas a la realidad.
Indaga en los orígenes de la violencia a través de la trayectoria de vida de un joven sicario, una especie de “mártir contemporáneo”.
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