México.- La “pausa” en la relación México-España no implica ningún cambio en materia diplomática ni en el ritmo de relaciones con el gobierno de aquella nación, subrayó el presidente Andrés Manuel López Obrador, al revelar que en un encuentro con el dueño de Iberdrola, el directivo asumió un “protagonismo irrespetuoso” y es esa misma empresa la que ahora hace gestiones, lobby, en contra de la iniciativa de reforma constitucional en materia eléctrica, promovida por su gobierno.
Señaló que la expresión acerca de darse un tiempo tampoco es ruptura.
“Ya lo expliqué ayer pero lo repito: no es una ruptura, es un señalamiento por los abusos cometidos por empresas españolas que han afectado al pueblo de México en otros tiempos.
Los jugosos negocios que se hicieron por influyentismo, por acuerdos cupulares de políticos de España y de México en los sexenios de Fox, de Calderón y de Peña Nieto”, dijo a la prensa.
En la conferencia de prensa matutina que hoy se realizó en Hermosillo, el mandatario fue enfático en los costos para el erario de los contratos, realizados en administraciones anteriores, con las españolas OHL, Repsol e Iberdrola, esta última – señaló- favorita del gobierno de Felipe Calderón, quien luego pasó a ser consejero del corporativo.