Por Erika Solorio
Los derechos humanos de los grupos vulnerables: niñas, niños, adolescentes, personas con discapacidad, gente en situación de calle, población indígena, adultos mayores, LGBTIQ+, deben ser respetados por todas las personas; el bien común es universal.
Un avance significativo para alcanzar el bien común es trabajando congruentemente desde nuestras trincheras, ya que la vulnerabilidad de diversos grupos ante la discriminación es una constante a nivel mundial. La falta de conocimiento no nos exime.
Los grupos vulnerables se refieren a individuos o colectivos que enfrentan desventajas sociales, económicas o políticas que les impiden disfrutar plenamente de sus derechos.
Las Naciones Unidas destacan: “Hay una necesidad urgente de asegurarnos que las personas mayores pueden participar de pleno en todos los ámbitos de la vida social. Aun así, las personas mayores suelen estar con demasiada frecuencia sujetas a discriminación, abandono, edadismo, exclusión y otras violaciones”.
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— ContraRéplica (@ContraReplicaMX) October 22, 2024
Las mujeres constantemente enfrentan discriminación y violencia de género, lo que afecta su acceso a la educación, empleo y atención médica. Niñas, niños y adolescentes son particularmente vulnerables a la explotación, el abuso y la falta de servicios básicos.
Asimismo, las personas con discapacidad enfrentan barreras físicas y sociales que limitan su participación plena en la sociedad. La población indígena sufre discriminación y marginación, enfrentando problemas relacionados con la tierra, lengua y cultura.
A los migrantes y refugiados a menudo se les niegan derechos básicos y se enfrentan a la xenofobia y la violencia. Las personas LGBTIQ+ pueden ser objeto de violencia, discriminación y violaciones a su identidad y expresión de género.
Los derechos humanos son universales y deben proteger a todos, pero se reconoce que los grupos vulnerables necesitan atención especial.
Derecho a la igualdad y no discriminación, todos tienen derecho a ser tratados con dignidad, sin importar su situación, derecho a la educación sin discriminación, a la salud, acceso a servicios de salud adecuados y a condiciones de vida saludables, derecho a la protección contra la violencia, el abuso y la explotación.
Es importante la educación y la sensibilización, informar a la sociedad sobre los derechos de estos grupos para fomentar la inclusión. Es de suma importancia la elaboración e implementación de leyes y políticas públicas para proteger los derechos humanos de todas las personas.
En pleno siglo XXI, con la globalización, con la inmediatez de la información y de las noticias, no podemos permitirnos violentar los derechos de las personas. Eleanor Roosevelt, dijo, que los derechos humanos se trabajan desde cualquier rincón del mundo. ¡Todas y todos somos responsables!
Por Erika Solorio, activista de derechos humanos, asesora política, comunicóloga social. Mtra. Administración y Políticas Públicas con Enfoque en Gestión Política.