Ernesto Madrid
De cara al encuentro que sostendrán las autoridades de Estados Unidos con las de México para tratar temas como la migración, el tráfico de drogas, en especial la del fentanilo, el gobierno de Estados Unidos señaló que quiere ver más capturas de narcotraficantes y más laboratorios de fentanilo desmantelados como prueba de que la colaboración en contra del tráfico de drogas está funcionando.
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, reconoció que en su nación hay un problema de demanda y “que tenemos que tomar medidas para reducirla. Al mismo tiempo, tenemos que tomar medidas con nuestros socios mexicanos para combatir el tráfico y esto incluye la destrucción de laboratorios en México y la captura de traficantes en la frontera y dentro de México”.
Lo curioso del caso es que este lunes, aparecieron narcomantas en Culiacán, Sinaloa, en las que los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán conocidos como los Chapitos prohíben la producción y tráfico de fentanilo en el estado y lo más curioso es que estos nuevos aviso aparece dos semanas después de que Ovidio Guzmán López se declarara no culpable de cinco delitos relacionados con el tráfico de drogas y lavado de dinero durante su primera audiencia en Estados Unidos tras ser extraditado desde México en dónde el gobierno llevó a cabo el proceso con secrecía.
Por lo pronto, en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador y el embajador Ken Salazar, se reunieron con una delegación del gobierno de Estados Unidos, misma que anunció el mandatario la mañana de este lunes, al señalar que “viene un asesor económico de la Casa Blanca, del presidente Biden”, con quién se reunió este lunes, pero la más interesante dijo que será “en estos días, -jueves y viernes- para tratar temas como la migración, como el tráfico de drogas, en especial lo del fentanilo.
En el marco y como preámbulo el portavoz del Gobierno de Estados Unidos Matthew Miller, dejo en claro que el gobierno del presidente Joe Biden desearía ver “un progreso” en todos los indicadores debido a que han “aumentado la cooperación” en contra de las drogas sintéticas y que seguirán haciéndolo porque el fentanilo es la causa número uno de muertes entre los jóvenes estadounidenses lo cual lo ha convertido en una crisis humanitaria ya que este potente opioide sintético lo fabrican los cárteles mexicanos según Washington, mediante productos químicos comprados en China y luego trafican con él a Estados Unidos.
Pero López Obrador dice que no es cierto que el fentanilo no se produce en México, sino que llega directamente desde el gigante asiático, a pesar de que su Gobierno ha desmantelado varios laboratorios de esta droga, pero lo curioso es que el grupo de los Chapitos se deslindó con sus narcomantas, y dónde aclararon que se prohíban las operaciones para trasladar -el fentanilo- a Estados Unidos y contribuir así con la epidemia de consumo de opioides.
“Nunca hemos sido ni seremos afines a ese negocio. Aténganse a las consecuencias. Att. Chapitos”, concluye el mensaje que fue tratado en el evento del cambio de comandante de la Novena Zona Militar, el gobernador del estado, Rubén Rocha Moya, quién comentó que no hay certeza de que las mantas (once en total) sean de quien las firma.