México.- Como medida para intentar salvaguardar la integridad de sus hogares y familias, cada vez más mexicanos buscan comprar un arma de fuego de forma legal. Los argumentos que exponen los ciudadanos que buscan obtener un permiso para el uso de un arma por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) van desde razonamientos como “proteger su patrimonio” hasta para cuestiones de trabajo y situaciones de recreación como la caza de animales y uso en campos de tiro.
Datos de la Sedena revelan que en el 2021, el número de solicitudes de ciudadanos mexicanos para portación de armas de fuego aumentaron 37.6% en comparación con el 2020. El Ejército está encargado de emitir las licencias de portación de armas, en donde para el 2020 se dio trámite a 215 solicitudes, mientras que para el 2021 la cifra escaló a 296.

Mexicanos inundan solicitudes para portar armas del Ejército
Sin embargo, la mayoría de los solicitantes que logran cumplir todos los requisitos de que estipula la Sedena, no cuentan con cursos ni capacitaciones previas para el uso correcto de un arma de fuego, mucho menos con la destreza suficiente para accionar un arma en situaciones de estrés como un asalto, robo a habitación o una situación de violencia.
Así lo afirmó en entrevista con Publimetro, Perla Ortega, presidenta de la organización civil “Seguridad por México”, quien cuestiona que al adquirir un arma de fuego, en automático, se genera más violencia y no necesariamente otorga más seguridad al usuario que la porta, independientemente si es para resguardarla en un domicilio o portarla en la vía pública.