Dicen que Luis Videgaray es a Peña Nieto, lo que Raúl Salinas a su hermano Carlos. ¿Será que nuevamente un personaje cercanísimo a un presidente podría pisar la cárcel? Eso parece ser el objetivo de la llamada 4T.
Las declaraciones de hace unas semanas que hizo Sergio Arturo Ramírez, abogado de Rosario Robles en el caso de la Estafa Maestra, vuelven a poner en la mira al ex Secretario de Relaciones Exteriores del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Aunque mediáticamente el caso “se enfrío”, debido a la coyuntura de los medios que se centraron a la muerte de Diego Armando Maradona, entre otros temas, muy pronto el apellido Videgaray estará en las portadas de periódicos y horarios estelares de los noticiarios. Les aseguro.
En este momento vale recapitular la historia oscura de operaciones financieras de Luis Videgaray Caso, pues se remonta –al menos en la esfera pública- a las campañas electorales para la presidencia de 2012.
Recordemos: como coordinador de campaña del entonces candidato Peña Nieto, Luis Videgaray fue señalado por encabezar una red de empresas fantasma y triangulación de recursos, a través de monederos electrónicos de Monex, para financiar e inducir el voto a favor del PRI.
El llamado Monexgate fue un escándalo, sin embargo en 2013 se le dio carpetazo. Todo ello a pesar de que se comprobó, según una denuncia de Roberto Gil Zuart y Ricardo Monreal, que la cuenta 03800806935 de Scotiabank en México, a través de la cual se triangularon recursos del gobierno del Estado de México para operación política, estaba a nombre de Videgaray Caso.
La habilidad financiera del hombre de confianza de Peña también se tradujo en otro éxito político, pues a pesar de la parafernalia y la proyección masiva en medios tradicionales y digitales, el entonces candidato priista, no rebasó los topes de campaña y esto fue gracias a una maniobra de “prorrateo”.
Es decir, que el gasto de los eventos en los que participó Peña, eran absorbidos casi en su totalidad por el presupuesto de candidatos locales (municipales, estatales) y “quemaban” los recursos de tres meses de campaña en un sólo acto estelar. Ahí estuvo la mano de Luis.
Otro escándalo ocurrió en 2016 cuando se descubrió que la tesis de titulación del ya presidente Enrique Peña Nieto, contenía plagios de más de 10 autores. Aunque se quiso manejar que eran “errores de citación”, lo que transcendió es que el autor material de dicha tesis no fue Peña Nieto, sino Luis Videgaray.
La periodista Anabel Hernández había denunciado desde el sexenio pasado que existía al interior del gobierno de EPN una estrategia para desfalcar Pemex. Dicha estrategia era encabezada, nuevamente por… sí claro: Videgaray.
Hace unos meses, entre febrero y marzo pasados, con la detención de Emilio Lozoya Austin, el nombre de Luis Videgaray Caso salió otra vez a la luz.
Según el ex títular de Pemex, el hombre de mayor confianza de Enrique Peña Nieto es el autor intelectual del desfalco a la petrolera nacional, así como de una serie de contratos irregulares con Odebrech.
El caso se reaviva luego de que la Fiscalía de la República emitiera una nueva orden de aprehensión contra la hermana de Emilio, Gilda Lozoya Austín,
En este contexto, Rosario Robles y Gilda ponen nuevamente a Videgaray bajo los reflectores y dicen que cuando el río suena…