En 1972 David Bowie editó el disco The Rise And Fall Of Ziggy Stardust And The Spiders From Mars, que es considero a la fecha como uno de los mejores discos en la historia del rock.
La propuesta de la grabación es algo compleja, está lleno de sonoridades y atmósferas adelantadas a su época, por decir lo menos, pero esa es parte de la clave de los aportes del disco.
Algunos de los temas más sobresalientes y perdurables hasta nuestros días aparecieron en este disco.
Entre ellos Five Years, composición trágicamente bella que anuncia el colapso del mundo en sólo cinco años… y la humanidad es plenamente consciente de ello.
La poesía nítida de David Bowie está presente en toda la composición, que comienza con una solitaria batería a la que se le une una lánguida guitarra acústica.
Moonage Daydream, track que posee el estilo más rockero del álbum, con un riff demoledor a cargo del guitarrista en ese momento de Las arañas de Marte: Mick Ronson.
Irrumpe entonces uno de los más grandes éxitos de David Bowie: Starman, cuya característica sonora fundamental es el empleo de disonantes guitarras acústicas.
La letra hable sobre la estancia de Ziggy Stardust, personaje icónico de David Bowie, en la Tierra, y por primera vez a sus habitantes, con un mensaje que cala hondo pero hace que la esperanza retorne al mundo.
It Ain’t Easy, trata sobre las dificultades de triunfar en el mundo del estrellato a ritmo del mejor glam rock.
El disco termina con Rock’n’Roll Suicide, otra compisición que acompañaría al Duque Blanco en todas sus presentaciones. Como curiosidad, los primeros versos están inspirados por Manuel Machado, hermano de Antonio.
David Bowie ha partido de nuestro mundo, que se ha convertido en un lugar más triste, sin él… pero gracias a sus discos, podemos seguir encontrando sentido a la existencia en este mundo.
Así que como se leía en las primeras versiones en vinilo del disco. “TO BE PLAYED AT MAXIMUM VOLUME…