Ciudad de México.- El Partido Revolucionario Institucional (PRI) anunció que no asistirá a la toma de protesta de los nuevos integrantes del Poder Judicial Federal, en rechazo frontal a lo que calificó como un “mecanismo de control político” impuesto por Morena.
La dirigencia nacional, encabezada por Alejandro Moreno y Carolina Viggiano, junto con el grupo parlamentario en el Senado, coordinado por Manuel Añorve, acusaron que el oficialismo se adueñó del Poder Judicial, lo sometió a intereses de partido y anuló los contrapesos que garantizan la libertad y los derechos de los mexicanos.
“No vamos a convalidar un modelo que concentra decisiones en un solo poder y debilita la vida democrática del país”, advirtieron. La decisión, dijeron, responde a una postura de congruencia política y defensa institucional.
Señalaron que la reforma judicial impulsada por Morena no promueve la independencia, sino que impone criterios que rompen el equilibrio de poderes y dejan indefensos a quienes se oponen al régimen.
El PRI ratificó su compromiso con la autonomía de las instituciones y la división de poderes como pilares de la República. “No vamos a normalizar el secuestro y destrucción de las normas y leyes que son base fundamental para la democracia”, sentenció el Comité Ejecutivo Nacional.