México.- La Relatora Especial de la ONU para la independencia de los magistrados y abogados, Margaret Satterthwaite, expresó al Gobierno de México su preocupación sobre el caso de la jueza Angélica Sánchez Hernández, de Veracruz, quién enfrentó en dos ocasiones una “detención arbitraria y faltas de debido proceso (….) “presuntamente en represalia por su decisión sobre la concesión de un amparo en un caso de alto impacto de Veracruz”.
La carta hecha pública este lunes por la propia relatora de las Naciones Unidas, 60 días después de que se enviara al presidente de México, recuerda que los jueces no deben estar sujetos a acciones penales o disciplinarias basadas en el contenido de sus decisiones.
“Mi preocupación ante los hechos descritos se basa en que, de ser ciertos, revelarían la violación de las normas internacionales relativas a la independencia del poder judicial contenidas en el artículo 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y precisadas en la Observación General 32 del Comité de Derechos Humanos.
La funcionaria pide hacer valer el principio básico de la norma internacional que establece que la independencia de la judicatura será garantizada por el Estado y proclamada por la Constitución o la legislación del país y todas las instituciones.
En el documento de 8 cuartillas se hace una relatoría de los hechos que llevaron a la “medida arbitraria” de detener en dos ocasiones a la jueza Sánchez, el 5 de junio en Xalapa y más tarde (16 de junio) en la Ciudad de México para someterla a un proceso penal bajo las acusaciones de cometer un delito contra la fe pública y tráfico de influencias.
De acuerdo con el escrito y la propia declaración de la jueza veracruzana, en el Cuartel de San José, un destacamento dentro de la Ciudad en la Zona Centro de Xalapa, Veracruz habría sido forzada a firmar unas hojas que parecían ser un informe de policía homologado, pero con renglones en blanco.