Luis Ayala Ramos
Los Reyes La Paz, Estado de México.- Lo que comenzó como una deuda de apenas mil pesos terminó en una tragedia inimaginable: Fernando, un niño de tan solo cinco años, fue hallado sin vida al interior de una vecindad en la colonia Ejidal El Pino, tras haber sido retenido y presuntamente asesinado por personas cercanas a su familia.
Según versiones oficiales, la madre del menor tenía un adeudo económico que no pudo cubrir. Los agresores, en lugar de buscar una vía legal, llegaron a su domicilio, y al no obtener el pago, se llevaron al niño con la promesa de que lo devolverían una vez liquidado el dinero.
Durante varios días, la madre buscó desesperadamente a su hijo, incluso acudiendo en múltiples ocasiones a la vecindad donde sospechaba que lo tenían. Sin embargo, los ocupantes del inmueble se negaban a darle información. No fue sino hasta el 4 de agosto que presentó una denuncia formal por privación ilegal de la libertad ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).
Ese mismo día, elementos de seguridad arribaron al sitio señalado. El olor fétido que salía de una de las habitaciones alertó a los oficiales, quienes ingresaron y hallaron bolsas de basura que contenían los restos del menor, ya en estado avanzado de descomposición.
Las autoridades detuvieron a tres personas en el lugar, quienes ya fueron puestas a disposición del Ministerio Público. La Fiscalía investiga su presunta responsabilidad tanto en el secuestro como en el homicidio del niño.
Vecinos del lugar señalaron que el menor rara vez era visto, aunque algunos mencionaron haberlo visto anteriormente con señales de violencia, como un ojo morado, lo que podría indicar que sufría maltrato antes de su muerte.
La Fiscalía estatal aseguró la vecindad como parte de las investigaciones. Mientras tanto, la comunidad está conmocionada por la brutalidad del crimen y exige justicia inmediata.
La presidenta municipal de La Paz, Martha Guerrero Sánchez, emitió un comunicado donde expresó su más profundo rechazo ante estos hechos y lamentó la pérdida de Fernando, solidarizándose con la familia.
Habitantes de la colonia demandan una investigación sin irregularidades y temen que las fallas en el proceso puedan derivar en la liberación de los presuntos responsables.