Ernesto Madrid
Mientras las opiniones en torno a si las tasas de interese ya no subirán porque se ha llegado al techo del ciclo alcista ante una inflación que estuvo ya 2.5 puntos por abajo del nivel más elevado al que llegó en septiembre de 2022 así como la subyacente (es decir, la que excluye alimentos y energéticos) y de manera muy destacada la inflación al productor, expertos señalan que los precios de los granos seguirán altos lo que podría revertir el dato de inflación.
¿Qué quiere decir esto?
Que, en el entorno, no nos podemos confiar aún que la línea de inflación haya llegado su fin ya que la guerra en Ucrania, uno de los principales países productores de granos y los cambios meteorológicos que se esperan con la entrada del fenómeno de El Niño, impactará en los precios de los cereales que se mantendrían altos durante el 2023.
Lo anterior es una postura que sustenta la Coface, (Compagnie Française d’Assurance pour le Commerce Extérieur) una aseguradora francesa de crédito multinacional, que conoce el mercado de riesgos y que, de acuerdo a la economista para América Latina de la empresa, Patricia Krause, el tener precios altos de los alimentos provocará impacto en los bolsillos de los consumidores.
¿Por qué? sería la pregunta.
Porque se advierte, por ejemplo que el trigo se afectará por lo efectos climáticos que se esperan en este año, “la producción del trigo no será tan buena y probablemente también se afectará por las ondas de calor” señala el especialista de Coface en temas agrícolas, Simón Lacoume.
Los precios de los granos seguirán a la alza y podría impactar en la inflación
En entrevista para El Universal, señaló que “el maíz y los cereales van a estar altos en sus precios” durante ese te año, además “el azúcar también se verá impactada por el fenómeno de El Niño y la producción va a ser golpeada por lo que los precios seguirán en aumento.
No es una buena noticia para el dato de inflación en los diferentes países incluyendo México, sobre todo, por el noticia que dio a conocer este lunes el Inegi, donde se advierte que, al término de marzo, los precios de los insumos para los productores ya tienen más bien una deflación de 1.2% a tasa anual, cuando en junio del año pasado la inflación era de 13.3% pero podría tomar otro camino.
Es donde se enmarca la postura de Coface al señalar que al igual los fertilizantes y fungicidas siguen con altos precios por la guerra en Ucrania, así que a ello se le sumarán los cambios en el clima y los riesgos geopolíticos, todo lo que provocará que sigan en aumento los precios de los granos en este año.
¿Qué se advierte?
Que, pese a que “el consumo de los alimentos es más resistente a los ciclos de desaceleración económica, los consumidores deben sustituir o reemplazar ciertos alimentos por otros más baratos”, sugiere el organismo.
Lo anterior ya que, si bien la inflación de los alimentos se ha moderado en el margen, se mantiene en niveles históricamente altos, lo que limita el poder adquisitivo de los hogares y es ahí, donde entraría de nuevo un ajuste en las tasas de interés de los diversos países, que, para el caso de México, habrá que espera la decisión de la Reserva Federal que sin duda será referencia para que el Banco de México la ajuste, quizás, un cuarto de punto más, para ubicarla en 11.50%.