Ernesto Madrid
El detalle más interesante es supuesto combate a la evasión fiscal para fortalecer los ingresos tributarios.
El mejor y más fuerte de los engaños para favorecer su fuerza al frente de el gobierno que no ha logrado controlar.
No obstante para el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, una acción que tomó especial relevancia en 2020 debido al impacto que tuvo la pandemia de COVID-19 sobre la economía y, con ello, sobre la recaudación de impuestos.
Dicho más claro, sólo le interesa el dinero para sus programas sociales.
Y si nos vamos más a fondo de acuerdo al Sr. Obrador también ha habido aspectos malos en su primer bienio.
De ellos fue el gasto “obstinado” en programas prioritarios y obras emblemáticas, mientras que la austeridad pasó de ser una política buena a una medida fea.
Sin aceptación de los expertos consultados por megaurbe.com.mx
Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP); Mariana Campos, coordinadora del programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa, y de Manuel Guadarrama, coordinador del Área de Finanzas Públicas del IMCO.
¿Seguirá la incertidumbre? Esa es la duda .