Ernesto Madrid
Mientras 14 senadores estadounidenses exigieron a la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, y a la representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, tomar medidas contra el aumento ‘insostenible’ de las importaciones de acero y aluminio mexicanos, la Cámara de Representantes solicitó iniciar una disputa formal bajo el T-MEC con México, por el nuevo decreto contra el maíz transgénico publicado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con base en una carta enviada, también a la representante Comercial, Katherine Tai y al secretario de Agricultura, Tom Vilsack, los legisladores señalan que no tiene fundamento científico, la política de México con respecto al maíz genéticamente modificado y, por el contrario, si causaría graves perjuicios a los agricultores estadounidenses.
Lo anterior, a pesar de los esfuerzos que está haciendo el gobierno del presidente Joe Biden, que consideran insuficientes, por lo que piden que, para eliminar la incertidumbre de los agricultores estadounidenses que se preparan para la temporada de siembra de este año, es imprescindible iniciar una disputa comercial.
“Creemos que es hora de hacer cumplir agresivamente el T-MEC iniciando una disputa formal contra estas medidas. La administración debe tomar medidas y asegurarse de que los países, como México, se enfrentan a consecuencias rápidas por no cumplir los compromisos comerciales con Estados Unidos”.
En ese mismo contexto, se pronunciaron los senadores estadounidenses que advierten al Gobierno mexicano, que se niega a remediar las importaciones de acero mexicano al superan los volúmenes históricos de comercio entre 2019 y 2022 y que están ingresando en el mercado norteamericano poniendo en riesgo su mercado.
“La oleada de importaciones de acero mexicano ya ha contribuido a la pérdida de más de 200 puestos de trabajo en el sector siderúrgico en California y ha provocado el cierre de una de las menos de una docena de fábricas estadounidenses que producen conductos de acero”, señalan.
En el contexto hay que recordar que EU levantó sus aranceles de 25 por ciento a las importaciones mexicanas de acero en mayo de 2019, pero el acuerdo estipula que, si las importaciones de acero aumentan significativamente más allá de los volúmenes históricos de comercio, la parte importadora puede imponer aranceles del 25 por ciento.
Motivo por el cuál, argumentan que México está violando la Declaración Conjunta que hizo con EU en 2019 sobre los aranceles de la sección 232 en las importaciones de acero y aluminio, por lo que reclaman a la administración de Joe Biden a iniciar de inmediato consultas en el marco del T-MEC que incluyan la reaplicación de los aranceles de dicha sección para garantizar el cumplimiento y proteger los empleos estadounidenses.