Agencias.- El conflicto entre Irán e Israel alcanzó un nuevo punto crítico este sábado 14 de junio, tras intensos ataques militares entre ambas naciones que han dejado decenas de muertos, cientos de heridos y severos daños a infraestructura civil y militar.
Desde el jueves 12 de junio, Israel ha ejecutado cerca de 150 ataques aéreos contra objetivos estratégicos en territorio iraní. Los blancos incluyen sitios nucleares como Natanz y Fordo, instalaciones militares, refinerías, campos de gas e infraestructuras clave en Teherán y otras regiones. Según reportes de medios internacionales, al menos 70 personas han muerto en Irán, entre ellas seis altos comandantes y Ali Shamkhani, figura clave en las negociaciones nucleares. Además, se contabilizan más de 320 heridos, incluidos científicos vinculados al programa nuclear.
En respuesta, Irán lanzó desde la noche del viernes cerca de 200 misiles balísticos y drones contra Israel. Las ciudades más afectadas han sido Tel Aviv, Ramat Gan, Haifa y Rishon LeZion, con al menos 17 puntos de impacto confirmados. Las autoridades israelíes informaron la muerte de siete civiles, entre ellos tres mujeres, además de más de 200 heridos y daños en zonas residenciales, hospitales y centros de investigación, incluido el Instituto Weizmann.
Conflicto en Medio Oriente deja más de 70 muertos en Irán
Entre los misiles iraníes utilizados se identificó el nuevo modelo “Shahed Haj Qassem”, con propulsante sólido y un alcance aproximado de mil 600 kilómetros, según reportes de Al Jazeera. Las Fuerzas de Defensa de Israel informaron que interceptaron múltiples proyectiles, pero no todos fueron detenidos.
Este sábado por la noche (hora local), Irán lanzó una segunda oleada de misiles sobre Israel. En reacción, el ejército israelí intensificó sus bombardeos en Teherán durante las primeras horas del domingo. Medios reportan al menos dos grandes explosiones en el noreste y oeste de la capital iraní. El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, advirtió que “Teherán arderá” si Irán continúa con los ataques.
La comunidad internacional ha comenzado a reaccionar ante la escalada. Estados Unidos negó participación directa en los ataques, aunque confirmó haber interceptado misiles dirigidos a Israel. Las conversaciones nucleares previstas entre EE.UU. e Irán en Omán fueron suspendidas. Por su parte, Rusia condenó los ataques israelíes y se ofreció como mediador. También se reportaron acciones militares israelíes contra una reunión de líderes hutíes en Yemen.
A medida que el conflicto se intensifica, persiste el riesgo de una guerra regional más amplia, con implicaciones globales. Israel estima que la ofensiva podría durar al menos dos semanas. El gobierno iraní advirtió sobre daños masivos en zonas residenciales y alertó que responderá “con fuerza total” a cualquier nueva agresión.