Ernesto Madrid
El departamento de Justicia de Estados Unidos anunció sus primeras acciones luego del acuerdo que suscribieron con México para combatir el tráfico de drogas sintéticas y armas por la frontera común, en las que destaca cargos contra 28 miembros del poderoso Cártel de Sinaloa, incluidos los hijos del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán luego de una extensa investigación por tráfico de fentanilo.
Lo interesante del caso es que el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, junto con la jefa de la Administración de Control de Drogas, Anne Milgram aclararon que las acciones van dirigidas a “la mayor y más prolífica operación de tráfico de fentanilo del mundo”, dirigida por el citado cartel y “alimentada por compañías farmacéuticas chinas”.
Estos cargos van directo a los distritos federales del Sur de Nueva York, el Norte de Illinois y el Distrito de Columbia contra 28 miembros, incluidos cuatro hijos del Chapo, así como presuntos proveedores de productos químicos, supervisores de laboratorio, traficantes de fentanilo, jefes de seguridad, operadores financieros y traficantes de armas.
“El mensaje -es- claro a los ‘Chapitos’, el Cártel de Sinaloa y las redes criminales de droga de todo el mundo de que la DEA no se frenará ante nada para proteger la seguridad nacional de Estados Unidos y de los estadounidenses” dejo en claro Anne Milgram.
En el contexto, hay que señalar que los “Chapitos” son los cuatro hijos de Joaquín Guzmán, antiguo dirigente de ese cartel: Iván Guzmán Salazar, de 40 años; Alfredo Guzmán Salazar (37), Joaquín Guzmán López (36) y Ovidio Guzmán López, de 33.
CONTRA TODO Y CONTRA TODOS
De este último el comunicado dado a conocer por el Departamento de Justicia, señala que está entre los “siete acusados que están detenido en espera de procedimientos de extradición”: Ovidio Guzmán López, que fue detenido en México; Carlos Omar Félix Gutiérrez y Silvano Francisco Mariano, alias el “Rayo”, detenidos en Colombia. Están también Sergio Duarte Frías, Ana Gabriela Rubio Zea y Humberto Beltrán Cuén, alias “Don Chino”, detenidos en Guatemala y Anastasio Soto Vega alias “Tachin” detenido en Grecia, además de Julio Marí.
Pero, además, los autos de acusación que también imputan a ciudadanos chinos y guatemaltecos por suministrar los precursores químicos necesarios para fabricar fentanilo están otros acusados en los casos incluyen a los encargados de dirigir laboratorios de fabricación de drogas y proporcionar seguridad y armas para el narcotráfico, dijeron los fiscales.
LA DEA EN MÉXICO
Otro detalle interesante es que Milgram afirmó que, durante el último año y medio, la DEA se infiltró proactivamente en el Cártel de Sinaloa y la red de los Chapitos, obtuvo un acceso sin precedentes a los niveles más altos de la organización y los siguió por todo el mundo. “Agradezco a los hombres y mujeres de la DEA por su trabajo excepcional en este caso”.
Destacó que “las acusaciones de hoy envían un mensaje claro a los Chapitos, el Cártel de Sinaloa y las redes criminales de drogas de todo el mundo de que la DEA no se detendrá ante nada para proteger la seguridad de Estados Unidos u la seguridad de la salud del pueblo estadounidenses”.
Lo anterior en el entendido de que “Los Chapitos fueron los pioneros en la fabricación y el tráfico de fentanilo, la amenaza de droga más letal que nuestro país haya enfrentado jamás, lo inundaron en los Estados Unidos durante ocho años y mataron a cientos de miles de estadounidenses”.
Es más, la fiscal general adjunta Lisa O. Mónaco, remarcó, en una alusión comparativa, que, así como han atacado a terroristas y ciberdelincuentes en todo el mundo, el Departamento ahora está librando una campaña incesante para interrumpir la producción y el tráfico de fentanilo, antes de que pueda llegar a sus víctimas.