Por Ernesto Madrid.
Con el fin de evitar el colapso y luego de la inauguración de los “Diálogos nacionales para la reforma del Poder Judicial”, la mayoría de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) propusieron que la sustitución de juzgadores se realice de manera escalonada lo cual fue avalado por el presidente López Obrado bajo la advertencia de que no se trate de una ´táctica dilatoria’.
“No me opongo, yo creo que lo fundamental es que se lleve a cabo la reforma y que el pueblo participe en la elección, el pueblo es sabio, prefiero que sea el pueblo que sean las cúpulas las que decidan (…) eso que lo definan (los legisladores), hablando en términos jurídicos o legales, no aplicar tácticas dilatorias”, advirtió.
Y mientras en la Cámara de Diputados en el marco del primero diálogo para la reforma al Poder Judicial los legisladores de Morena y PT reiteraron que la reforma judicial va -sí o sí- y adelantaron que la elección popular de jueves, magistrados y ministros es irreductible porque es un mandato del pueblo, López Obrador dejo en claro que “no esperar que se vaya el tiempo, como algunos que estaban esperando que pasara el tiempo y que nos fuéramos, ya nos vamos a ir, nada más que la transformación va a continuar”.
En el contexto, la ministra presidenta de la SCJN Norma Piña remarcó que “La justicia en México no es un monopolio del Poder Judicial” y que se está en el umbral de una reforma al Estado desde sus cimientos refirió que en la propuesta impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador no “debe pesar más la celeridad que la idoneidad por lo que pidió a sus críticos que partan de la verdad, de datos ciertos y cifras correctas.
“Seamos críticos de la justicia en México, la realidad no nos permite otra actitud, pero apliquemos la crítica en la que se encuentre en el centro de esta, las necesidades de las víctimas y de las y los usuarios del sistema de justicia en general” ya que las víctimas y quienes acuden al sistema de justicia merecen personas juzgadoras honestas, con vocación de servicio, empáticas y capacitadas.
Lo ministros en tanto, reforzaron la postura de que sustituir en un momento a más de mil 600 personas juzgadoras federales generaría un desajuste importante en el funcionamiento de la impartición de justicia en México; que una reforma mal hecha podría convertir a la justicia en una subasta de jueces y magistrados, y que el método de elección popular generará compromisos políticos y con el elector, lo que impide la imparcialidad.
En lo que estuvo de acuerdo López Obrador al celebrar en su mañanera de este viernes que los ministros e integrantes de Consejo de la Judicatura participen en los foros, pero sobre todo que reconozcan que hace falta una reforma al Poder Judicial.
“Eso es un avance importantísimo y es digno de reconocimiento, que ellos acepten que es necesario que se reforma el Poder Judicial. Los cómo, las formas, con el diálogo se puede llegar a acuerdos, pero ya he estado escuchando, primero que aceptan la reforma, eso es un gran avance, si hay voluntad de cambio se avanza mucho (…) segundo ya algunos están aceptando que se elijan los jueces, magistrados los ministros, están aceptando que sea el pueblo que los elija”.
Incluso consideró que los actuales ministros de la SCJN pueden participar en la elección para que se sometan al escrutinio público y por austeridad, el Mandatario sugirió que solo hay una elección, pero que se dé tiempo para que la gente se informe y conozca a los aspirantes; que se tome en cuenta la paridad de género, pero lo fundamental es la elección, remató.